lunes, 24 de febrero de 2014

Y yo con estos pelos

Alopecia es el término que se emplea normalmente para definir la pérdida total o parcial del cabello. La caída del cabello suele hacerse de forma gradual y puede afectar a una única zona de la cabeza (por parches) o de forma generalizada. El cuero cabelludo contienen aproximadamente unos 100000 pelos. Lo normal es perder unos 100 cabellos al día.

Esta caída puede verse incrementada notoriamente por diversos factores (estrés, trastornos hormonales como la menopausia, medicamentos y diversas enfermedades). ¿Cuáles son las causas principales por las que se nos cae el pelo? De forma habitual, se nos puede caer el pelo por alguna de las siguientes razones:
  • ·      Estrés emocional intenso.
  • ·      Dietas drásticas, especialmente las que no contienen proteínas.
  • ·      Cambios hormonales (menopausia, embarazo, parto).
  • ·      Enfermedades tiroideas.
  • ·      Anemia.
  • ·      Muchos medicamentos, como los retionoides, anticonceptivos orales, antidepresivos, AINES (entre ellos ibuprofeno), betabloqueantes.



La caída del cabello es normal en las personas. Para detectar que sufrimos una caída fuera de lo normal, debemos estar atentos a nuestras actividades cotidianas. Si observamos que aparecen demasiados pelos en la almohada, el cepillo, el peine, la ropa, etc, podemos pensar que estamos ante algún trastorno de nuestro cuero cabelludo. En estos casos es importante acudir al dermatólogo para que valore dicha situación.

¿Se puede prevenir la caída del cabello? En muchas ocasiones, la caída del cabello viene directamente relacionada con una mala alimentación que nos puede provocar un déficit de vitaminas. Es en estos casos en los que una alimentación equilibrada se convierte en nuestra mejor aliada. Existen una serie de alimentos que nos pueden ayudar a frenar la caída del cabello. Son:
  • ·      Levadura de cerveza: este alimento es muy rico en biotina, una vitamina esencial para que el pelo crezca sano, fuerte y con brillo. Esta vitamina también la podemos encontrar en el hígado y en los huevos (siempre y cuando éstos estén cocinados, ya que si el huevo está crudo, nuestro cuerpo no puede absorber la biotina).
  • ·      Espinacas y acelgas: gracias a su contenido en ácido fólico. Una dieta estricta en vegetales de hoja verde nos puede llevar a sufrir de anemia. Esto provoca una mala oxigenación en los tejidos, haciendo así que el pelo se encuentre débil y sin fuera, provocando su caída.
  • ·      Minerales como el hierro y el zinc también tienen una estrecha relación con la caída del cabello. Estos minerales se encuentran en carnes, pescados, huevos, lentejas y espinacas. Su absorción está relacionada con el contenido en Vitamina C, por lo que el consumo de frutas cítricas también nos va a ayudar a conseguir un pelo fuerte y con brillo.



Además de la alimentación, podemos ayudar a nuestro cabello con champús y lociones capilares que proporcionan fuerza y brillo a nuestro pelo. En los últimos tiempos, el desarrollo de la nutricosmética ha hecho que diversos problemas, como la caída del cabello, se aborden de una forma integral. Cuidados diarios y complementos alimenticios hacen que consigamos un cabello fuerte, voluminosos y de aspecto totalmente sano.

Los Laboratorios Innèov han desarrollado Densilogy, un complemento nutricional que favorece el anclaje y crecimiento de nuestro cuero cabelludo. Este complemento actúa desde el interior, en el bulbo capilar, ayudando a que el pelo se mantenga firmemente anclado y con un crecimiento adecuado. Contiene un complejo único que asocia el 100% de los aportes diarios recomendados en Vitamina D, ácidos grasos esenciales Omega 3 y zinc.

Densilogy presenta una eficacia clínica probada bajo control dermatológico en la belleza del cabello y de las uñas. Mejora la calidad, el volumen y el diámetro de los cabellos, así como una mejora en las uñas frágiles y quebradizas desde el primer mes.

Para conseguir esta mejora en nuestro pelo, debemos tomar dos cápsulas al día durante una comida, con un gran vaso de agua, durante al menos tres meses.






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